viernes, 10 de marzo de 2017

¿SOCIALIZACIÓN O REFLEXIÓN PERSONAL?


¿ES SIEMPRE BUENO QUE LOS VALORES MORALES SE CONSIGAN POR SOCIALIZACIÓN?

Pese a que la mayor parte de nuestros valores morales los conseguimos gracias a la socialización, existe otra forma de hacerlos nuestros a través de reflexiones personales. Interiorizarlos por socialización es lo más habitual y frecuente, pero: ¿es siempre bueno conseguirlos de esta manera?

Gracias a la socialización vamos incorporando desde que somos niños distintas normas y valores a través de cuentos, historias o dibujos que nos enseñan lo que está bien y lo que está mal. Esto permite que se aprenda muy rápidamente aquellos valores “básicos” que la sociedad considera correctos sin siquiera cuestionarlos. De esta forma, los niños no podrán decidir si ese valor bueno para su sociedad es negativo o no y establecerá una base o jerarquía de valores aceptada por la misma. Así, los valores más básicos y fundamentales los habrá aprendido sin apenas darse cuenta y sin esfuerzo. Otro aspecto positivo de la socialización es que permite acelerar el proceso de aprendizaje de las personas desde edades tempranas y más adelante, evitar que se cometan ciertos actos que la sociedad podría considerar malos (como por ejemplo robar) o los niños no hablarían con desconocidos evitando determinados problemas.
En resumen, gracias a la socialización aprendemos a respetar normas y, por tanto, respetamos también aquellas que nos inculca nuestra sociedad, adaptándonos a ella de una forma mucho más sencilla y rápida.

Sin embargo, no siempre es bueno que se adopten por este medio, ya que de esta manera todos los valores serían impuestos por la sociedad en la que uno se encuentra y responderían a los intereses de la misma y no a los del individuo. Tampoco hay que olvidar que gracias a nuestros valores y decisiones construimos nuestra personalidad y esta es la que nos define y, por lo tanto, para construirnos como personas es necesario que tomemos nuestras propias decisiones, aunque nos equivoquemos. Por otro lado, también hay videojuegos o cuentos que pueden transmitir valores negativos que niños que no hacen una reflexión sobre ellos puede adoptar sin más.

En mi opinión, también es bueno que, aparte de adoptar valores por socialización, cada persona reflexione sobre si algo le parece bien o mal, aporte argumentos a favor y en contra y tome una decisión que a él le parezca la más acertada. Porque de esta forma, si se equivoca al tomar su veredicto, aprenderá de su error y lo hará mejor la siguiente vez. Otro aspecto importante es que gracias a la reflexión conseguiremos conocernos mejor a nosotros mismos y tendremos un mayor control de las situaciones al plantearnos diferentes posibilidades. Tendremos capacidad para cuestionarnos si estamos o no de acuerdo con un valor y de si este nos beneficia o no en lugar de interiorizarlo sin más. Así evitaremos que en un futuro puedan manipularnos intentando que interioricemos antivalores como el egoísmo, la intransigencia o la intolerancia, que producirían un rechazo por parte de miembros de nuestra comunidad.

1 comentario:

  1. ¿Y todo lo que sale de uno mismo será siempre mejor que lo que sale de la sociedad?

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